La prima de riesgo y los Sin Techo

Resulta chocante que cuando hablamos de crisis económica abusemos de términos tan abstractos como prima de riesgo, déficit público, recortes o caída del PIB. ¿Por qué no hablamos de personas? Por ejemplo, de aquellas que no tienen un lugar donde dormir, de las que pasan sus noches en la calle. Por increíble que parezca, y pese a que vivimos en un mundo en el que casi todo se mide, apenas contamos con datos fiables de cuánta gente vive en la calle ¿Cuántos son? ¿Dónde están? ¿Cómo pasan sus noches?

Barcelona, 8 Noviembre de 2011. Un total de 696 voluntarios se reúnen a la hora de cenar para recibir las últimas instrucciones, tomar un tentempié y ponerse en marcha poco antes de la medianoche. Su misión es recorrer las calles de la Ciudad Condal para hacer un recuento de las personas que pasan la noche a la intemperie. Esta iniciativa lleva el nombre de Diagnosi 2011 y supone una re-edición del recuento realizado en 2008 (Diagnosi 2008). Está auspiciada por la XAPSLL (siglas en catalán de “Xarxa d’Atenció a Persones sense Llar” o “Red de Atención a Personas Sin Techo” en castellano), un conglomerado formado por varias asociaciones locales y que cuenta con el apoyo del Ayuntamiento de Barcelona.

Esa noche los cerca de 700 de voluntarios se distribuyen en pequeños grupos que se dedican a peinar todos los rincones de la ciudad – desde las zonas altas hasta los barrios menos amables – para poder saber con certeza cuántas personas no tienen un sitio donde dormir. En palabras de Guillermo Casasnovas, uno de los participantes: “Es una experiencia que te marca. Yo ya fui voluntario hace 3 años y me sorprendió – y entristeció – ver que hay muchas personas en mi propio barrio que, llegada la noche, no tienen ningún sitio donde ir. Este año he repetido para ayudar a la causa y también porque es una buena manera de no olvidar que hay mucha gente a nuestro alrededor en situaciones muy precarias.”

El resultado final es descorazonador. En Barcelona hay 838 personas “sin techo”: algunas duermen en la vía pública, otras en jardines, muchas recurren a los cajeros (curiosa paradoja que la pobreza se refugie en los bancos). La distribución por sexo resulta llamativa: hay 607 hombres por “solo” 59 mujeres, mientras que hay un total de 172 personas “que con la simple observación de los voluntarios no se puede determinar si son hombres o mujeres”. Otro dato escalofriante: casi la mitad de estas 838 personas pernoctan en solitario, mientras que el resto se agrupan para pasar la noche.

Pero ¿cómo se siente un sin techo? “Lo peor es no poder comer, no tener donde dormir. Eres un cadáver ambulante. Andas, respiras, pero pierdes toda la noción de ti mismo, no tienes ninguna autoestima”, señala Fernando, un hombre de 61 años que ha dejado atrás sus días en la calle y que participó como voluntario en Diagnosi 2011.

Un último apunte: a las 838 personas sin techo contabilizadas en este recuento, hay que añadir las 695 que duermen en asentamientos y las 1.259 que están alojadas en recursos residenciales de la XAPSL. Hablamos pues de un total de 2.791 personas sin hogar en Barcelona. Un mazazo en toda regla.

En efecto, ésta es la verdadera cara de la crisis. Y en ocasiones preferimos ignorarla, cerrar los ojos y no mirar de frente a todos esos “gorriones” que tan lúcidamente describió Yosi en la canción “Pardao”

‘Pardao’
Mira que vida lleva
su patria y su hogar es una acera.
‘Pardao’
Mira que vida pasa
el parque es su tierra, la calle su casa.
‘Pardao’
Mira que vida lleva
no tiene familia no tiene bandera.
‘Pardao’
Mira que vida pasa
su luz las estrellas, su cama la plaza

Artículo de Manuel Bruscas.

Visto en 3500 Millones.

Juventud sin futuro

En planta a las siete y media de la mañana, recluidos hasta las tres de la tarde, y apremiados por una incertidumbre vaga, afísica; irreal. Así es como se sienten muchos jóvenes hoy en día, indeterminados ante un futuro que cada vez se vuelve más dudoso.

¿Qué quieres ser de mayor? Solía ser la pregunta clave de las conversaciones con los adolescentes, hace no muchos años. A los clásicos médico, abogado, científico, bombero, policía… de antaño, que ya están prácticamente extintos; hay que sumar ahora el gran protagonista de estos tiempos: ‘no lo sé’. Muchos podrían afirmar que se trata de una duda natural, ante la aparente infinitud de posibilidades que se abren ante el joven. Otros, más derrotistas, afirmarían que es la propia juventud la que se corrompe sin freno, producto de unas vidas demasiado fáciles y de una carencia total y absoluta de disciplina.

Bueno, quizá sea cierto. Los chavales de hoy en día no están bajo el yugo de la figura paterna omnipotente, de la mano dura de una madre poco indulgente, o simplemente amordazados en las cuentas del rosario de un religioso. Pero, ¿es todo culpa suya? No debemos olvidar que estos niños no son sino el fruto de esta generación que tanto echamos en falta; la generación del respeto y la autoridad. Parece que algo no fue demasiado bien por el camino.

Volviendo al tema que nos atañe-los jóvenes de hoy, no los de un ayer ya lejano-, quizá deberíamos de ver qué estamos haciendo con nuestra juventud, con sus esperanzas y sus sueños. Y quizá deberíamos de preguntarnos que qué va a ser de ellos en un mañana incierto.

La subida de las tasas universitarias, la no-universalidad de la Seguridad Social, la dificultad para encontrar empleo, o la criminalización preventiva que sufre todo adolescente hoy en día, hacen que uno (o una) se replantee muchas cosas. Pero, lejos de empezar a despotricar contra las medidas de un gobierno que quizá no sabe, o quizá no quiere; o más bien que quizá sea un poco de las dos, creo que deberíamos de empezar a plantearnos qué es lo que tendríamos que hacer “los de a pie” para lograr romper con esa miasma de pesadumbre.

¿Y qué se puede hacer? Reconocimiento. Apoyo. Motivación. Hay miles de palabras más que encajan en este artículo, pero esas tres son fundamentales. Apoyo para superar el presente, reconocimiento para apreciar el pasado, y motivación para forjar el futuro. Tal y como dijo un señor llamado Albert Einstein “Toda persona es un genio. Pero si juzgas a un pez por su habilidad para escalar un árbol, creerá toda su vida que es un estúpido”.

Quizá nuestros jóvenes puedan encontrar mañana las soluciones a los problemas que se nos antojan hoy irresolubles. Pero ese quizá nunca será nada si nos dedicamos a minar un camino que ya es duro de por sí.

Enrique Delgado, alumno de 2º de Bachillerato del IES Gran Capitán.

La campaña «Banca Bajo Control» ha conseguido un pequeño gran éxito

Hace poco menos de un mes nos hacíamos eco de la campaña Banca Bajo Control, pues parece que el apoyo que muchas personas han prestado a esta campaña ha tenido un pequeño gran éxito, puesto que la comisión parlamentaria de Cooperación Internacional ha instado al Gobierno a regular las inversiones financieras especulativas sobre bienes alimentarios de primera necesidad.

Concretamente se pide al Gobierno que impulse “las medidas necesarias para evitar los movimientos de carácter exclusivamente especulativo” y defender ante el G20 el “freno a la especulación en el mercado de alimentos”. Con esta regulación, no podrían comercializarse productos financieros como el fondo «100% Natural», que se consiguió que Catalunya Caixa retirara.

¡Felicitamos a Veterinarios sin Fronteras, Mundubat y COAG por este éxito!.

 

Da la la lata contra la violencia de género

Se culpa a la mujer de la expulsión del Paraíso

Se la identifica con la impureza y el pecado.

Se instaura la familia patriarcal: la mujer es propiedad del hombre.

En Europa fueron quemadas en la hoguera 50.000 mujeres.

La ablación es practicada desde hace 1.400 años.

Se usa la violación como arma de guerra: 250.000 mujeres en Ruanda, 200.000 en la R.D. del Congo, 20.000 bosnias. Violaciones masivas en Bangladesh, Colombia, Liberia, Sierra Leona y Libia.

Una de cada tres mujeres es maltratada.

Si embargo esta historia está cambiando gracias a muchas personas que «han dado la lata». Pero aún queda mucho por hacer, ¡cambiemos esta historia de desamor! ¡conserva tu conciencia intacta contra la violencia de género!.

¡Da la lata contra la violencia de género!