Los países del cuerno de África se encuentran en estado de alerta después de que dos temporadas sin lluvias hayan dejado a diez millones de personas al borde de la inanición.
La sequía y el desplazamiento de población, combinado con el aumento de los precios mundiales de los alimentos han provocado que especialmente Kenia y Etiopía se enfrenten a la que la OCHA define como la peor crisis de seguridad alimentaria registrada hoy en el mundo.
El equipo de ayuda humanitaria de InspirAction está evaluando la mejor manera de ayudar a la población, que está sufriendo las consecuencias de la peor sequía registrada en los últimos 60 años.
«La crisis no es nueva, sino que ha venido desarrollándose desde hace algún tiempo, especialmente en Kenia y Etiopía, y su gravedad está aumentando en toda la región», advierte Isabel Ortigosa, responsable de incidencia de InspirAction. «La gente está desesperada y si no actuamos ahora podríamos estar ante una de las peores situaciones humanitarias que el mundo ha visto en mucho tiempo.»
Se necesitan urgentemente fondos para:
- El suministro de agua en las aldeas más afectadas por la sequía
- La compra de alimentos para las familias, especialmente para los niños desnutridos y las mujeres embarazadas
- La compra de alimentos para el ganado, que es crucial para la supervivencia de las familias.
Al mismo tiempo, InspirAction teme que empeore la situación de un gran número de personas que se han desplazado dentro de Sudán y de Somalia y que también se enfrentan a la escasez de alimentos.