El genial MEL describe con humor y crudeza la semejanza entre «este mandatario» español del siglo XVI que considera a los «indios» americanos salvajes «subhumanos» sin alma, por tanto sin derechos, y «este político» español del siglo XXI, que «sin decir» que los inmigrantes no tienen derechos, en el trato otorgado a los mismos carecen de ellos.
Imagino que estaremos todos de acuerdo en que el primer personaje representa el pensamiento de los mandatarios de entonces, pero y el segundo, ¿representa el de los políticos de hoy?.