Si tienes en Irán una tendencia sexual distinta a la de la mayoría corres el riesgo de ser ejecutado a muerte, como se indica en esta noticia donde decenas se personas serán ejecutadas por ser homosexuales y centenares han sido ya detenidas, ¿porqué?, al parecer Irán aplica desde mediados de mayo un plan de seguridad en diferentes ciudades del país, incluida la capital, cuyo objetivo es, según las autoridades, «limpiar esas ciudades de los criminales y los malvados».
Es horrible que en pleno siglo XXI se pueda seguir condenando a alguien, y nada menos que a muerte, por su orientación sexual. Hoy día son ciertos países musulmanes los más duros en la represión, lo que nos indica la profunda necesidad de reforma que tienen tales sociedades. No obstante, también hay que reconocer que hasta hace relativamente poco en Occidente se perseguía o discriminaba por esta materia (aunque hace siglos que sin esa virulencia, excepto en el período nazi); asímismo, ha habido otros regímenes no islámicos que practicaban tal persecución, en especial los comunistas o filo-marxistas (como incluso el actual Zimbabue). El caso más contumaz fue el de la isla de C…(1), detallado en el documental «Conducta impropia», de Néstor Almendros, si bien parece que la situación ha cambiado y el propio Jefe del Estado ha encargado a su sobrina que encabece un movimiento para integrar en cierta manera a estas minorías y lavarle la cara al régimen. (1): He puesto C… por no volver a escribir Cuba y que no se moleste nadie.
En mi opinión, el término comunista o comunismo debe manejarse con
cuidado, y no como el Sr Manzaneda lo hace en su comentario. La propia
definición de comunismo es controvertida, no hay más que ver su
definición en la wikipedia en español
http://es.wikipedia.org/wiki/Comunismo , donde su entrada está protegida
de la edición hasta que se superen grandes discusiones en torno a su
definición.
El neoliberalismo, el neoconservadurismo, el capitalismo, la derecha en
general, las clases acomodadas dominantes y en general todos los
miembros del bloque hegemónico (en el sentido de Gramsci) medios de
comunicación hegemónicos, etc; definirán comunismo básicamente como ?el
demonio?, o tal y hablarán de él siguiendo los principios del infame ?El
libro negro del comunismo: crímenes, terror y represión?.
Por el contrario, los trabajadores con conciencia de clase, las clases
más desfavorecidas, los colectivos emancipadores de todo tipo de todo el
mundo, tienen otra visión del comunismo y sus ideales bien distinta a la
que nos quieren hacer comulgar el bloque hegemónico dominante. El miedo
que tienen las clases dominantes es fundado, pero no por el peligro de
?el demonio?, sino porque ven peligrar su estatus dominante actual, su
posición favorecida y desigual en el modelo de la actual sociedad
capitalista.
Según mi concepción del socialismo y del comunismo, regímenes
autoritarios, no democráticos y represivos del siglo pasado no fueron
comunistas. Aunque algunos se empeñen, sobre todo por conveniencia
interesada y no por rigor histórico, en calificarlos así. Ni lo serán
nunca porque no tienen coherencia con los principios básicos del
socialismo y su fin último: el comunismo. Otros sí lo fueron y lo son
con mayor o menor éxito en el desarrollo de sus respectivas sociedades,
sobre todo teniendo en cuenta las dificultades con las que se encuentran
estos proyectos en el capitalismo global actual. Pero los primeros, en
mi opinión, no se pueden calificar así.
Quizás debamos buscar otra palabra para definir los principios, los
ideales del socialismo y del comunismo, ya que la palabra ?comunista?
nos la han robado para ya no poder volver a usarla nunca (aunque yo
personalmente opino que debemos seguir usándola). Pero hoy día existen
muchas personas trabajando bajo esta palabra por una sociedad mejor,
personas que creen firmemente en los principios de libertad, democracia,
igualdad, sostenibilidad, y desarrollo emancipador de todas las
personas, y que siguen llamándose comunistas a pesar de lo difícil que
es esto hoy día. Personas que tienen el mismo derecho a desarrollar su
papel en nuestra sociedad que cualquier otra persona que milite en
opciones políticas de la derecha, la socialdemocracia, etc.
Países que podríamos calificar de socialdemócratas (o neoliberales o de
derechas) también han hecho barbaridades en muchos puntos del planeta, y
no por ello calificamos toda socialdemocracia como sistema del horror.
Seamos serios.
Vamos a ver. La entrada se refería a la justa indignación que nos debe producir el hecho de que en varios países islámicos se siga condenando, incluso a muerte, en razón de la tendencia sexual de las personas. Yo me adhería a tal condena, y sólo para no establecer una total visión en blanco y negro en esta época (como sería considerar que sólo en el Islam hay represión por este motivo) recordaba que ello se ha dado y se da también en otro tipo de culturas y regímenes. Entre ellos destacan los que habitualmente son considerados comunistas. La postura del Sr, Romero, muy habitual, es el máximo ejemplo de la falta de honradez intelectual. No me parece que el Blog de solidaridad sea el mejor sitio para rebatir sus afirmaciones, y menos en esta entrada, pero sí quiero formularle una pregunta: Si los llamados regímenes comunistas no los considera él como tales, ¿por qué llama infame al «Libro Negro del Comunismo»? Tal libro sólo se refiere a tales regímenes, y si él no se siente identificado con ellos, ¿por qué le molesta que se expongan sus crímenes? Si es por la utilización del nombre de Comunismo, ¿quiere decirse con ello que admitiría tal obra sólo con que el título hubiese sido «El Libro Negro de una serie de regímenes» y tuviese el mismo contenido que el que tiene, sólo que suprimiendo el nombre de Comunismo? Muy bien. Desde ahora no hablaré de los crímenes del comunismo cubano, sino sólo de los crímenes del Sr. Castro. ¿Contento?