Hoy 8 de marzo, como hace un año, conmemoramos el Día Internacional de la Mujer, celebramos y reconocemos la lucha de la mujer por su participación, en igualdad con el hombre, en la sociedad y en su desarrollo integro como persona. Además rendimos homenaje a tantas y tantas mujeres que se han dejado la piel en esta lucha y que gracias a ellas se han obtenido muchos logros en este ámbito.
Y hoy vamos a aprovechar para reivindicar lo mucho que queda por hacer para alcanzar la igualdad de derechos entre mujeres y hombres, y como la pobreza se ceba más en las mujeres por el hecho de serlo recortando aún más sus derechos y haciéndolas más pobres, indicadores de esto son:
- La alta mortalidad materna en las mujeres más pobres alcanzando la cifra de una muerte por minuto, algo escandaloso a lo que las autoridades deben por freno. Cuando estas mujeres tienen que pagar la atención médica se producen retrasos que pueden ser mortales en la decisión de ir a la clínica o al hospital, retrasos en el desplazamiento al centro correspondiente debido al tiempo invertido en recaudar el dinero necesario y retrasos en recibir el tratamiento una vez están allí. La pobreza lleva a la mortalidad materna, y las muertes y lesiones derivadas de la maternidad hunden más a las familias en la pobreza. Las mujeres que mueren dejan tras de sí familias que luchan por sobrevivir. Cada año, más de un millón de niños y niñas se quedan huérfanos de madre.
- Los asentamientos precarios donde viven más de mil millones de personas de los que gran parte son mujeres, a quienes además se les suele negar el derecho a una vivienda digna y otros servicios básicos como el acceso a escuelas y hospitales. Y en el caso de las mujeres se les excluye de los procesos de toma de decisiones que afectan su vida y rara vez disfruta de una protección jurídica integral, además la falta de instalaciones aumenta el riesgo agresiones o acoso sexual y a menudo la policía no se toma en serio las denuncias de violencia, sobre todo en el ámbito familiar. La legislación en materia de propiedad también discrimina con frecuencia a las mujeres.
- La vulneración de los derechos de las mujeres por parte de las empresas se produce con demasiada frecuencia al aprovecharse éstas de normativas nacionales endebles y mal aplicadas, lo que sumado a la ausencia de mecanismos internacionales de rendición de cuentas produce un efecto devastador en los países en desarrollo. Estos abusos se dan mucho en la industria extractiva donde debido al impacto que sus operaciones tienen en los recursos de tierras y agua obligan a comunidades a reubicarse por la fuerza para dejar paso a las actividades de extracción que contaminan y sobreexplotan la tierra y del agua puede destruyendo y poniendo en peligro los medios de subsistencia tradicionales.
Finalmente os animamos en este día a que firméis la reivindicación de Amnistía Internacional para que la ONU luche y se ocupe más efizcamente de los derechos de las mujeres y que echéis un vistazo a estos enlaces que nos han gustado:
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