Nunca en mi nombre

Corren tiempos políticos que no me atrevo a calificar desde este blog para no adulterarlo, tenemos una clase política que no merece a ciudadan@s como nosotr@s porque en este caso me niego a creer que tengamos lo que nos merecemos, tenemos políticos que nos engañan, nos manipulan, nos arrojan a los unos contra los otros y a las otras contra las unas como si fuéramos peones de ajedrez en vez de personas con sentimientos, que fomentan el odio en vez de la reconciliación, administraciones que mienten hasta en datos objetivos como el cálculo de unos manifestantes sabiendo las dimensiones del recorrido y teniendo fotos aereas (porque alguna tiene que mentir si hay una diferencia de un 1000% entre las estimaciones), parlamentari@s que no respetan el turno de palabra del otr@, ya sea porque se van a tomar café cuando habla alguien «poco importante» o porque abroncan al «importante» para que no hable (¡vaya ejemplo para nuestros alumn@s!), portavoces de partidos políticos que parecen hooligans. Ya no se libran ni los símbolos que representaron valores tan dignos de elogio como el lazo azul o la canción Libertad sin Ira de desnaturalizarse y de perder su sentido a manos de los que nos representan.

En este contexto que hoy estamos viviendo me parece que la lectura de la carta Nunca en mi nombre de Bárabara Morales García, viuda de una de las víctimas del 11-M, a pesar de su tristeza pone una nota de cordura en todo este caos y debería ser un ejercicio de reflexión obligado para toda la clase política que nos representa. Esta carta ha sido hoy publicada en el Periódico de Catalunya y a continuación reproducimos:

NUNCA hubiera imaginado que mi vida iba a convertirse en lo que ha sido desde el 11 de marzo del 2004. Nunca hubiera imaginado que tres años después las cosas estarían tan mal. Nunca me creí aquello de que todos íbamos en ese tren. Hoy menos que nunca. Las páginas de los periódicos, las firmas de ciertos periodistas, por desgracia, me dan la razón.

NUNCA pedí estar donde estoy. Nunca me he creído con más derechos por ser víctima. Nunca me he considerado más autorizada para expresar mi opinión que otra persona. Nunca he pretendido ser jurista. No permito que aquellos que tenían el poder de hacer cumplir las leyes pretendan ahora culparme de no querer redactarlas. Los que se manifiestan estos días en mi nombre y el de otros como yo jamás me han preguntado lo que pienso o lo que siento. Si quieren mi protagonismo les cambio el sitio. Pero con todo. Les ofrezco también mi sufrimiento.

A quien pueda interesar le diré que por tercer año consecutivo el 11 de marzo lo paso fuera de España. Porque hay una parte de esta España tan unida, tan decente, tan de gentes de bien que a veces duele y avergüenza demasiado, que pregunta muy poco, que escucha mucho menos, que hace demasiado ruido y que no se interesa por cuidar a quienes tienen la indecencia de decir que representan.

NUNCA he dado permiso a nadie para hablar por mi boca, para llorar por mis ojos, para decir cómo debo sentirme. Por eso me da tanta vergüenza que unos u otros intenten aprovecharse de la debilidad debilidad de la víctima. Por eso, además de al dolor de una pérdida, me enfrento a la rabia de saber que somos juguetes en manos de quienes tuvieron el poder de haber evitado tantos asesinatos y tantos intentos de asesinato. Juguetes para jugar a su juego de buenos y malos.

NUNCA he permitido que ningún político hable en mi nombre, o me hable de héroes, o me dé palmadas en la espalda. Hoy tampoco. A quien pueda interesar, soy una persona normal, tengo 29 años, lucho cada día por mantenerme fuera de este circo; sueño con que algún día se olvidarán de nosotros, dejarán de aprovecharse de nuestra desgracia, de escupir en nuestras heridas para hacerlas sangrar y ofrecernos la pomada-que-todo-lo-cura.

A quien pueda interesar, no soy solo una víctima del terrorismo, como cualquier otra persona tengo una vida compleja, con problemas y alegrías. A mi dolor por ser víctima, a veces se le añade el ser mirada solo como víctima. A quien pueda interesar, tengo familia a la que quiero y me quiere, también tengo amigos. Ellos son quienes me escuchan, quienes me conocen, quienes me preguntan, quienes me consuelan, quienes me hacen reír, quienes me respetan, quienes nunca han osado aprovecharse de mí, quienes nunca me han vendido por un precio tan bajo. Ellos son los que sufren conmigo si me hacen daño y son felices cuando sonrío. Ellos son los que llevan conmigo tres años en este tren.

Que nadie pueda pensar que con este artículo queremos desde este simple blog continuar sembrando la semilla de la discordia, para nada, la única semilla que queremos sembrar es la de la justicia, porque sin ella no se alcanzan otros valores de los que se llenan tanto la boca algunos que muchas veces no se lo qué quieren decir: la libertad y la paz.

Rafael del Castillo

El infortunio de nacer niña en la India

Nuestra compañera María Aguilera nos cuenta en el blog de Igualdad como el gobierno de India pondrá cunas en la calle para evitar el infanticidio de niñas. Esta medida pretende evitar que los padres y madres â??se deshaganâ? de sus hijas (bien mediante el aborto selectivo, o bien después del alumbramiento).

Al parecer el padre/madre que se quiere deshacer de su hija, normalmente por no poder pagar la «dote» para que se pueda casar, la deposita en una cuna que está en la calle y algún funcionario la recogerá para entregarla en adopción. ¡Impresionante!.

Más información aquí.

«Todo NO me parece bonito»

Unos padres han denunciado a la empresa de sanidad creadora de este anuncio, Sanitas, por haberse negado a asegurar a su hija Candela, de dos años y medio, con síndrome de Down. Sin embargo esta empresa emite anuncios donde aparecen personas con esta enfermedad. Además, estos padres aseguran que la empresa se negó a ofrecerles el formulario para solicitar la póliza y posteriormente, se negaron a facilitarles la hoja de reclamaciones, por lo que acudieron a la oficina de consumo para interponer una queja contra la compañía.

En otro medio de comunicación aparecen manifestaciones de Sanitas que me llaman la atención:

Sanitas dice que no asegura a gente con síndrome de Down porque las «prestaciones serían excesivamente limitadas»

En un comunicado, manifiesta que puede hacer los anuncios porque los hijos de afiliados si tienen el síndrome, sí son asegurados.

Además, señala que como entidad privada tiene «derecho a contratar o no» a quien quieran.

Pues todo esto «no parece tan bonito».

Rafael del Castillo

Contra las bombas de racimo

Sus colores y formas llamativas las convierten ante los ojos de sus víctimas en un juguete, un frasco de perfume, una lata de refresco o, incluso, en ayuda humanitaria. El envoltorio ilusorio de una bomba de racimo y su gran tasa de error para detonar al contacto con el suelo han transformado a estas armas en la pesadilla latente de la población de cualquier conflicto. Un 98% de las víctimas de este armamento son civiles, especialmente niñas y niños.

España es uno de los países que posee y fabrica bombas de racimo. Varias empresas -Expal Explosivos, Instalaza S.A., Santa Bárbara e Internacional Technology S.A.- las producen, pero la falta de transparencia en este comercio hace imposible averiguar los países que las compran. Además, el Ejército español, según reconoce el propio Ministerio de Defensa, tiene un arsenal limitado de esta clase de armas. En concreto, posee dos modelos de fabricación nacional y otro importado de EEUU.

Se da una contradicción curiosa: España las vende y luego manda soldados a los países que las han comprado para que las desactiven, como sucede en Afganistán y Líbano.

Los pasados días hubo una reunión en Oslo para lograr un tratado que regula o prohíba el uso de estas armas, pero los principales países productores de las mismas no han acudido al encuentro.

Actualmente más de 70 países, entre ellos España, fabrica y comercializa estas bombas cuyas principales víctimas son civiles.

Más información:

Rafael del Castillo.

Las patentes impiden curar las enfermedades

¿Qué debería mover a los investigador@s a encontrar remedios para las enfermedades? ¿el prestigio personal? ¿el enriquecimiento de la empresa que los patrocina? ¿el noble intento de conseguir una vida mejor para quienes sufren estas enfermedades?. Seguro que la mayoría de las personas que aún creemos en las utopías pensamos que la respuesta correcta es la tercera, pero la realidad parece negar que esto sea así.

Un ejemplo lo tenemos en esta noticia donde nos cuentan que millones de personas están condenadas a la ceguera por culpa de las patentes.

Una patente, según la wikipedia, es:

un conjunto de derechos exclusivos garantizados por un gobierno o autoridad al inventor de un nuevo producto (material o inmaterial) susceptible de ser explotado industrialmente para el bien del solicitante de dicha invención (como representante por ejemplo) por un espacio limitado de tiempo (generalmente 20 años desde la fecha de solicitud).

O sea, que quien inventa algo, si lo patenta tiene derecho a explotar ese invento para su lucro personal e impedir a otros la fabricación de los productos que de ahí se deriven sin su consentimiento. No vamos a entrar a debatir en esta ocasión acerca de la ética de las patentes y de las consecuencias y contradicciones en las que se caen al tratar la propiedad intelectual como una propiedad tangible. Pero seguro que estamos de acuerdo en que cuando las patentes impidan que se salven vidas, que se mejore la calidad de vida de las personas, que disminuya el sufrimiento de quien padece enfermedades habría que hacer una excepción y anteponer esos derechos «humanos» a los derechos «comerciales» de los creadores de las patentes.

A esa conclusión se llegó en la Declaración de Doha (año 2001) donde los líderes mundiales acordaron que hay que anteponer la salud de las personas a los beneficios económicos. Ya hablamos de este asunto en otra ocasión en este blog.

Sin embargo hoy, después de seis años, muchísima gente sigue sufriendo por no poder acceder a los medicamentos genéricos por culpa de la presión de las grandes industrias farmaceúticas, que argumentan que estas medidas eliminarían los incentivos a la investigación.

Para concluir algunos datos:

  • La ceguera es evitable en el 75% de los casos, pero la falta de acceso a medicamentos genéricos condena a la misma a 30 millones de personas.
  • Sólo 21 de las 1.556 nuevas sustancias comercializadas entre 1975 y 2004 iban dirigidas al tratamiento de enfermedades exclusivas de los países pobres.
  • El 90% de las ventas de estas compañías se concentran en Norteamérica, la Unión Europea y Japón.
  • Amparándose en la defensa de su propiedad intelectual las farmacéuticas Genetech y Novartis quieren impedir la comercialización del tratamiento genérico contra la degeneración macular, una enfermedad de la visión asociada al envejecimiento. De prosperar su iniciativa el coste del tratamiento pasará de 160 euros por persona y año a 23.000.

Más información en el documento «Visión de negocio: Por qué las reglas de propiedad intelectual impiden curar la ceguera en los países pobres» elaborado por Oxfam y Visión Mundi.

Rafael del Castillo

Diamantes ensangrentados

Los «diamantes ensangrentados» son diamantes de zonas en conflicto cuyo comercio ilegal exacerba los abusos contra los derechos humanos. Gracias a ellos, en los últimos tiempos se han financiado en África conflictos que han provocado la muerte y el desplazamiento de millones de personas. Durante estos conflictos, los beneficios del comercio ilegal de diamantes, que ascendían a miles de millones de dólares, sirvieron a los caudillos militares y a los grupos rebeldes para comprar armas. Se calcula que en Angola, la República Democrática del Congo, Liberia y Sierra Leona han muerto 3,7 millones de personas en conflictos mantenidos, en parte, gracias a los diamantes. Es tarea de los gobiernos y la industria de los diamantes garantizar que no llegan a los consumidores diamantes procedentes de zonas en conflicto.

Si quieres actuar participa en la Campaña de Amnistía Internacional

España: ¿8ª potencia mundial? ¿estado del bienestar?

EspañaEn este artículo se dan datos interesantes que cuestiona la idea que tiene de España mucha gente acerca de la riqueza española y sus logros sociales, algunos de ellos son:

  • La población en riesgo de pobreza en el 2004 es del 20% (la media europea es del 16%).
  • Los mayores de 65 años son los que más riesgo tienen de caer en una situación de pobreza (29% frente al 19% de la UE).
  • El gasto social está muy por debajo de la media europea: 20% del PIB frente al 27,3%.
  • El acceso a la primera vivienda propia es más difícil que en la UE.

«Vergonzosa la actuación del Gobierno con los inmigrantes del Marine I»

desembarco inmigrantesAsí califica SOS Racismo la manera de actuar del Gobierno español con los inmigrantes del barco que se estropeó cerca de Canarias y estuvo frente a las costas de Mauritania bastantes días sin que pudieran desembarcar. España y Mauritania tuvieron una larga discusión para ver quien se comía el marrón. Graves acusaciones las que lanza SOS Racismo que de ser ciertas indican violaciones de la normativa internacional y contradicen el «talante solidario» que muestra (o quiere mostrar) nuestro Gobierno con el problema de la inmigración.

Rafael del Castillo.

Los suevos o cuando los políticos no saben Historia

suevos

Sentí un repelús intenso al escuchar, en un fallido intento de salirse por la tangente vía irónica, al señor Rajoy contestar a la pregunta sobre su opinión acerca de las recientes declaraciones de Aznar en las que ¡por fin! reconocía la inexistencia en Irak de armas de destrucción masiva (no olvidemos: argumento central para montar la invasión ilegal de ese país) o puede que sobre los interrogatorios de la policía española a los succionados en el campo de concentración neonazi de Guantánamo, con un â??no pretendo ser textualâ?? â??Mire usted, a mi hábleme de cosas serias y cercanas y no me hable de un asunto que es Prehistoria o como mucho de época de las invasiones bárbaras â??suevos- que lo que le interesa a los españoles es la actualidadâ?.

Me invadió el escalofrío porque la persona que se manifestaba de esa manera no era ni chirigotero mayor de la cuadrilla del Libi ni un orate que recorre tocando el cencerro las esquinas del pueblo, sino un personaje al que los suyos atribuyen una cabeza bien amueblada e incluso lo jalean como chispeante y ocurrente en su dialéctica y, lo que cataliza la desagradable sensación antes mencionada, que además pretende convertirse en futuro Presidente del Gobierno.

Y al analizar un poco su mensaje podíamos llegar a la conclusión de que en su teórica buena formación académica se observa una falla conceptual tan estrepitosa que, siguiendo las normas establecidas en la actual enseñanza secundaria, lo haría clarísimo candidato a ser uno más de los múltiples ejemplos de fracaso escolar completo que los informes PISA endosan una y otra vez a nuestro país, pues a bote pronto observamos:

  • Supina ignorancia en Matemáticas. No sabe distinguir cantidades y confunde 4 con 1600 años, con lo que cualquier problema que se le ponga (sobre euros o kilómetros de autopistas construidas sin que se dé en ellas corrupción urbanística), puede arrojar un resultado disparatado. Así que es mejor no pensar lo que ocurriría cuando elaborara los Presupuestos Generales del Estado.
  • No controla ejes cronológicos mínimos. Trocea la Historia como si de una morcilla se tratara y, siguiendo su esquema mental, es capaz de poner la Revolución Francesa antes que el primer triunvirato romano y si la invasión de Irak la sitúa en el siglo V, el desembarco de Normandía caerá a la altura de las reinos helenísticos y esto puede tener graves consecuencias para la salud mental de quienes â??como él- pretenden hacer de los conceptos â??Patriaâ? o â??Españaâ? pilares de un pensamiento ideológico, sin darse cuenta que con tanto salto de siglos, sus bienamados Reyes Católicos, timbre de unidad, pudieron no conquistar Granada por dedicarse a pintar bisontes en Altamira.
  • En asimilación de conceptos tipo â??Antes/ Despuésâ? no progresa adecuadamente pues si los vuelos clandestinos de la CIA con prisioneros secuestrados y torturados o la guerra de Irak, para él siempre ocurrieron en un â??antesâ? que como mínimo tuvo lugar en el Paleolítico, el falso axioma â??11 â??M : quién ha sidoâ? no puede vivirse en un â??ahoraâ? actual cuando el hecho fue coetáneo, un poco posterior, a la guerra que fue â??antesâ?, pese a que día a día celebren manifestaciones pidiendo aclaraciones, â??ahoraâ?, de los acontecimientos de Madrid.
  • Como se desprende del galimatías anterior, el no tener claro un â?? antes / despuésâ? condiciona también la idea â??delante / detrásâ? y puede que la acusada â??estadounidensefiliaâ?, unida a la confusión de conceptos, de Don Mariano termine pasándole factura si su amigo tejano Jorge lo invita a una â??sexpartyâ?, y le obligue a finalizar la fiesta de pie y escocido por no haber sabido colocarse correctamente.
  • Y así podríamos haber seguido hilvanando taras en las distintas áreas de conocimiento, desde el Francés, idioma perfectamente controlado cuando se trató de hacerle reverencias al Imperio hasta la Música (las bombas y los ayes pueden lograr la categoría de celestial), cuando en su Adaptación Curricular Individualizada sólo necesitaba aprender cuatro respuestas:
    • Contrición: Me equivoqué. Pido perdón.
    • Torpeza: No lo sabía (aunque por ello deba cargar con la apócrifa frase atribuida a la mujer de un prohombre hispalense cuando fue nombrado alcalde franquista: â?? Que mi marido era tonto lo sabíamos en casa, ahora lo sabrá todo el paísâ?).
    • Sumisión / Falta de personalidad: Me arrastró mi amigo José Mari al convertirse en mamporrero del chuleta de Texas.
    • Cinismo: Sabía lo de los secuestrados en Guantánamo, sabía lo de la inexistencia de armas de destrucción masiva, pero tenía un plan y me da igual lo que dijisteis y lo que digáis.

Por ello resulta especialmente doloroso comprobar como gente que blasona de una hipersensibilidad ante cualquier cuestión que roce, aunque sea tangencialmente, el terrorismo de ETA y se desgañita por â??la ausencia de libertades en Cubaâ?, tengan una manga tan ancha y tan escaso conocimiento geográfico (otra asignatura suspensa) cuando se trata de denunciar al campo de concentración de Guantánamo o se niegue a condenar las decenas de miles de muertos que la intervención en Irak, por ellos auspiciada, por ellos patrocinada (¿cuál es la diferencia ética o moral entre los que no condenan el terrorismo etarra y los que no lo hacen con el terrorismo â??intervencionistaâ??) ha ocasionado, pese a que todas las organizaciones mundiales de Derechos Humanos lo hagan.

Y para hacer justicia (y de camino honrar la memoria de Hermerico o Rekhiario), debemos denunciar las estupideces vengan de donde vengan para evitar que el españolito de a pie, harto de sandeces, pregone voz en grito su contundente y consabido â??Estoy hasta los suevosâ?.

Juan Rivera.

Y voló en dirección al sol a Guantánamo

Hace bastante tiempo los gobiernos de los países «civilizados» construyeron un marco legal «civilizado» que garantizaba una serie de derechos humanos a las personas detenidas por cualquier acción. Este marco legal impide prácticas como la tortura, vejaciones a prisioneros, tratos inhumanos, etc, etc… propias de países y dictadores que hoy todo el mundo repudia por convicción, por oportunidad o por moda.

Ante esto algún(os) gobierno(s) piensa(n) que esta «cantidad de derechos» que adquieren los detenidos les hace perder eficacia a la hora de obtener información de los mismos ya que un juez tiene que autorizar la detención, hay que tener pruebas, no pueden coaccionarlos a dar ciertas informaciones en los interrogatorios (esta es la forma civilizada de llamar a la tortura), tienen que tener un abogado presente que vele por los derechos del detenido, etc… Y se plantean llevarse a estas personas a un limbo jurídico donde estas normas no les sean de aplicación, y a este limbo le vamos a llamar…. Guantánamo.

Pero no sólo les basta con adulterar el principio y la humanidad de estas normas escudándose en su letra pequeña, ahora toca llenar Guantánamo de gente, que para eso cabe mucha, ¿cómo lo hacen?, es complicado porque no pueden pedir permiso a un juez para «detener» a alguien llevandoselo a un sitio donde le puedan hacer lo que quieran sin que el juez pueda decir nada. Lo mejor es secuestrarlos, meterlos en un avion y llevárselos. Da igual que sea en el propio país, en el de al lado o al otro lado del Altántico, pero que no se entere nadie (al menos mientras se produce el «secuestro»).

Al final sabemos que en Europa hubo estos secuestros, hubo cárceles secretas e ilegales, y un total de 1245 vuelos ordenados por la CIA desde aeropuertos europeos con gente secuestrada (algunos que pasaban por allí) y con destino Guantánamo. En España hubo 68. Los gobiernos europeos, incluído el nuestro, lo sabían pero miraron para otro lado, ¿quien le va a decir algo al primo de Zumosol?. Yo tenía la esperanza después de que las tropas españolas salieran de Irak que nosotros eramos capaces, pero veo que me equivoqué.

Siento verguenza y un olor nauseabundo después de leer todo lo referente a la actitud de los gobiernos europeos en todo este asunto, incluído el nuestro, por supuesto, que ahora no ve conveniente crear una comisión de investigación que aclare el papel que hemos jugado por acción u omisión en todo este escándalo, ¿porqué? ¿miedo a la verdad y a la transparencia?.

Todos los responsables de este episodio indignante por acción u omisión consciente siguen en el poder, seguirán y he perdido la esperanza de que sean alguna vez juzgados por alguien o algo distinto de la Historia.

Más información aquí y aquí.

Rafael del Castillo.