Hace poco leà en internet: â??La historia de Bolivia se escribe con los piesâ?. Creo que en España hacer algo con los pies es hacerlo mal, sin embargo, en Bolivia escribir la historia con los pies significa ir construyendo un paÃs con la gente que se mancha de tierra al caminar, con la gente que camina… a pie y unida. Con los campesinos, los indÃgenas, los mineros y los trabajadores y, por supuesto, con las campesinas, las indÃgenas, las mineras y las trabajadoras. Las incansables y luchadoras mujeres bolivianas, cuádruplemente excluidas: por ser mujeres, por ser indÃgenas, por ser pobres y, ahora también, por ser bolivianas.
¿Qué está pasando en Bolivia?
Según nuestros medios de comunicación pareciera que una panda de salvajes, â??subdesarrolladosâ? y malagradecidos con â??sus hermanosâ? españoles quisieran arrebatarnos algo a nosotros… y al parecer lo que nos quieren arrebatar es tan gordo que se ha convertido en asunto de estado. Además pareciera que Evo Morales, presidente electo por mayorÃa absoluta (por cierto, en unas elecciones con un Ãndice de participación del 81%, que ya lo quisiéramos en España para nosotros) anteayer iba caminando por la calle, se encontró con Fidel Castro y Hugo Chávez y éstos dos le convencieron de que nacionalizara los hidrocarburos solo para fastidiar al resto del planeta y, por supuesto, para fastidiar a Repsol y, de paso, a todos los ciudadanos de España. Algo asà como lo que le sucedÃa a Pinocho en el cuento cuando iba a la escuela y dos gamberros le convencieron de que se fuera de juerga con ellos… con la diferencia de que el Pinocho oficial del planeta, vive bastante más al norte que Evo, Chávez y Castro.
Repito ¿qué está pasando en Bolivia? Para algunos lo que está pasando es algo que hay que frenar como sea (¿tenemos miedo de algo?), para otros es sÃntoma del escaso desarrollo del paÃs…. para mà (y pido perdón si ofendo a alguien pero es mi opinión, sólo mi modesta opinión) lo que está pasando en Bolivia es lo más esperanzador y coherente que ha ocurrido en el mundo en los últimos años.
Imagina que naces en uno de los paÃses más ricos del mundo (el paÃs del que proviene la expresión â??vale un potosÃâ?, precisamente por la cantidad de oro y piedras preciosas que habÃa, digo bien, habÃa en las montañas de la región boliviana de PotosÃ). Rico en todo tipo de recursos naturales entre los que se encuentra el preciado oro negro, el petróleo, además de flora y fauna, minerales, agua, gas, etc. Imagina ahora que, a pesar de las riquezas de TU paÃs, y el 80% de la gente como tú, recibes por tu trabajo menos de 2 â?¬ al dÃa, es decir, menos de 60 â?¬ al mes. Imagina que no tienes para comer, ni para una buena casa, ni para estudiar, ni para pagar la luz y el agua y, por supuesto, ni para ir al médico si te enfermas. Imagina que un buen dÃa te preguntas por qué los demás se hacen ricos con tus riquezas mientras tu sigues siendo pobre, ignorado y excluÃdo.
Pues lo que está pasando es precisamente eso, que en Bolivia se han dado cuenta de que las empresas extranjeras se llenan los bolsillos con sus recursos naturales mientras dejan a su paso miseria, explotación y contaminación. Se han dado cuenta de que muchos paÃses que no tienen la riqueza de Bolivia se llaman a si mismo ricos, mientras a ellos los llaman pobres. Y se han dado cuenta de que los ricos no son ricos, sino que se han enriquecido, al igual que los pobres no son pobres, los han empobrecido. Digo más, los hemos empobrecido.
Y se han cansado de aguantar…. asà de sencillo. Pero no nos confundamos, no se cansaron la semana pasada, ni el mes pasado. No se cansaron porque Evo Morales se lo dijo… hace años que están roncos de gritar â??¡¡BOLIVIA NO SE VENDE!!â?. Y el derecho que tienen a gritar es tal que se encuentra amparado por varias medidas y normas legislativas:
Según los artÃculos 136, 137 y 139 de la Constitución PolÃtica del Estado â??los hidrocarburos son bienes nacionales, de dominio originario, directo, inalienable e imprescriptible del Estado boliviano, de forma que constituyen una propiedad pública inviolableâ?. Según el inciso 5 del artÃculo 59 de la mencionada Constitución â??los contratos de explotación de riquezas nacionales deben ser autorizados por el Poder Legislativoâ? (los contratos realizados hasta la fecha, tanto a Repsol como al resto de transnacionales, incumplÃan esta norma, por lo que son ilegales). Según los artÃculos 24 y 135 de la Carta Magna boliviana â??todas las empresas establecidas en el paÃs se consideran nacionales y, por tanto, están sometidas a la soberanÃa y autoridades de la Repúblicaâ?.
La decisión de nacionalizar los hidrocarburos, además de estar amparada por la ley, no obedece más que a la decisión del 70% de bolivianos y bolivianas que, el 18 de julio de 2.004, aprobaron en un referéndum vinculante la recuperación de sus recursos naturales. ¿El hecho de que sean mayoritariamente pobres e indÃgenas no les da derecho a elegir democráticamente su destino?.
Desde luego que la historia no es sencilla de comprender, las cosas no ocurren porque si, de la noche a la mañana, sino que se gestan lentamente. Bolivia es un paÃs inestable: en sus 181 años de democracia ha sufrido 187 intentos de golpes de estado, solo en los últimos 70 años más de 10 presidentes bolivianos han ocupado su cargo por periodos inferiores a un año (alguno incluso por periodos de 15 dÃas o 1 mes). Algo pasa en Bolivia, algo pasaba ya en Bolivia antes de Evo Morales. A mà me parece que la única diferencia con la Bolivia de hace 10 años es que ahora tiene un presidente que, por ahora, escucha a su pueblo, ese pueblo que lleva años gritando, pidiendo justicia, esperanza, futuro y dignidad. Ese pueblo que quiere lo que es suyo, lo que la tierra les regaló, lo que les pertenece (¿o es que si tu vas de visita a casa un amigo y ves que en el armario tiene un pantalón que te gusta, te lo quedas?).
En los últimos 6 años Bolivia ha tenido 5 presidentes (sin contar a Evo Morales) y todos ellos han intentando vender todo lo vendible: el agua, el gas, el petróleo, etc. En los últimos 6 años han intentado aumentar desmesuradamente los impuestos, reducir los salarios, congelar las inversiones públicas, subir las tarifas del agua potable….. Y el pueblo boliviano ya debe sentir que se les ha colmado la paciencia. Ahora Bolivia exige, al menos, ser escuchada. Y yo creo que es absolutamente merecedora de este derecho. El derecho de los pueblos a gritar para defender lo que es justo deberÃa ser siempre directamente proporcional al deber de sus gobernantes a escuchar, y por primera vez en muchos años de historia (no de historia de Bolivia, de historia del mundo) asà ha sido. Tal vez en lugar de llevarnos las manos a la cabeza deberÃamos felicitar a Evo Morales por darnos ejemplo.
Desde mi punto de vista está bastante claro y es bastante razonable lo que está pasando en Bolivia, pero
¿Y lo que está pasando en España?
Creo que tengo capacidad de entender las cosas, si me las explican, asà que me gustarÃa que alguien me explicara por qué razón estamos en España tan preocupados por lo que le puede suceder a Repsol tras esta medida boliviana. Hasta donde yo sé, esta empresa ni está en bancarrota, ni depende en exclusividad de los yacimientos bolivianos, ni se va a ir a la ruina. Hasta donde yo sé, esta empresa es de capital privado, español, si, pero privado… vamos que sus beneficios solo repercuten en los bolsillos de unos cuantos accionistas, no en los de los españoles de a pie. Hasta donde yo sé, además, el gobierno boliviano no está â??echandoâ? del paÃs a estas empresas. Podrán continuar su trabajo, solo que en condiciones de equidad; Evo Morales lo expresaba esta misma mañana de una manera bastante clara: â??Bolivia no pretende expropiar, confiscar o expulsar a las empresas petrolÃferas. No serán más las dueñas de nuestros yacimientos, pero podrán seguir siendo sociasâ?.
Supongo que lo que preocupa a los ciudadanos es que suba el precio de los combustibles…. pero resulta que el precio de los combustibles lleva subiendo de manera imparable e irracional desde hace más de tres años, casualmente los mismos años que dura ya la famosa guerra de Irak, esa que se hacÃa para garantizar la paz mundial, o algo asÃ, esa que iba a durar una semana, esa que iba a garantizar a los y las iraquÃes (y al mundo) una vida mejor. Pues sÃ, puede que el combustible suba, perdón, siga subiendo, pero me temo que eso mejor serÃa contárselo al Pinocho del que os hablaba antes.
Para finalizar, quisiera dejaros una pregunta: Si tú fueras boliviano o boliviana y amanecieras una mañana viendo el panorama actual ¿Qué pensarÃas de tu gobierno?¿Y del nuestro?.
Marta Barreira Sevillano (Coordinadora del proyecto Ideas de MaÃz, impulsado por MAÃZCA e IDEAS).